Acudí a Psicomaster por un problema de ansiedad, que se había apoderado de mi vida hasta el punto de imposibilitarme realizarla de forma normal. Todo eran miedos y ese temor hacía que cada vez me recluyera en un espacio más pequeño e incluso así, seguía con ese miedo constantemente presente.
En Psicomaster me ayudaron a entender ese miedo y a convivir con él, lo que hizo que se debilitara mucho, hasta casi desaparecer. Ahora, varios años después, soy consciente no solo de la cantidad de herramientas que tengo a mi disposición para mantenerlo a raya sino también de la fortaleza que descubrí en mí al afrontarlo, lo que me ha servido para emprender proyectos que antes sólo eran sueños.
Ahora, gracias a esa experiencia, conozco mi fuerza y mi capacidad para enfrentarme a cualquier situación con la que me tenga que ver en la vida. Durante mi tiempo en terapia aprendí a conocer mi mente y a reconocer las trampas que a veces me pone. Conocer esas trampas significa no caer en ellas. Me siento, en definitiva, más libre y más capaz, y más cerca que nunca de mis objetivos, con el añadido de disfrutar más plenamente de todo, sin velos, sin miedos.
Nunca he podido hacer nada mejor por mí.