Todos utilizamos de forma habitual el término ansiedad haciéndolo frecuente en nuestro vocabulario diario. Reconocemos fácilmente ciertas situaciones ansiógenas como ir a un examen, una entrevista de trabajo, hablar en público, rupturas de pareja… así como las manifestaciones que subyacen a las mismas. Pero en este post vamos a ir más allá: vamos a hablar sobre la ansiedad incapacitante.
La cuestión que pretende responder el presente texto va dirigida a qué hacer cuando la ansiedad nos afecta a diferentes áreas de nuestra vida. También nos centraremos en cuáles son los pasos y las pautas que debemos seguir para obtener una solución. El objetivo es claro, encauzar la dirección que queremos llevar en nuestra vida. En Psicomaster nuestros psicólogos expertos en ansiedad te lo explican
¿Qué es la ansiedad incapacitante?
Cuando hablamos de ansiedad en general nos referimos a la manera en la que la mente y el cuerpo reaccionan ante una situación de alerta. Es decir, cuando nuestro sistema percibe algo como peligroso se activa todo el dispositivo tanto fisiológico, cognitivo y motor.
De la misma forma que nuestros ancestros salían corriendo ante la presencia de un león, evolutivamente hemos aprendido que debemos de reaccionar de la misma manera. El problema es que a veces nuestra mente entiende algo como amenaza cuando objetivamente tal estímulo no lo es. Y esta forma de responder lo hemos aprendido a través de nuestra historia de aprendizaje.
Por ejemplo, al tener una mala experiencia ante una situación de hablar en público, condicionamos estímulos relacionados con la misma, de tal forma que sólo con que me digan que tengo que hacer una exposición en público, generaré la misma respuesta de ansiedad que tuve en el pasado.
Cada vez es más frecuente normalizar la ansiedad quitando la denominación de patología, puesto que todos en algún momento del día podemos sentir las consecuencias de la misma. Sin embargo, hay varios parámetros que indican cuándo la ansiedad puede volverse incapacitante, significando un problema en la vida de la persona.
Uno de los indicadores es la intensidad. Una ansiedad baja o media no tiene que suponer un problema para el individuo. Se ha demostrado que si vamos a un examen con niveles medios de ansiedad es probable que obtengamos un mejor rendimiento. En cambio, cuando es elevada puede ser una ansiedad incapacitante, interfiriendo de forma significativa y afectando a áreas importantes de nuestra vida.
Síntomas de la ansiedad incapacitante
Si nos referimos a la ansiedad incapacitante como aquella que cursa con intensidad, afectando de forma significativa a las áreas importantes de la vida de una persona, hablamos de síntomas como:
- En lo fisiológico: palpitaciones, sudoración de manos, enrojecimiento de la piel…
- En lo cognitivo: pensamientos rumiativos
- En lo motor: necesidad de escape-huida
Esta sintomatología cursa en cualquier episodio de ansiedad. Sin embargo, la ansiedad incapacitante bloquea la vida de la persona, pudiendo afectar de forma significativa al rendimiento laboral, académico, personal e incluso en los planes de ocio y salidas. Esto puede llevar a una situación de aislamiento.
Los disparadores de la ansiedad incapacitante son muy diversos y están muy relacionadas con las respuestas de miedo, de ahí la percepción de “querer salir huyendo”. Puede haber ansiedad ante las relaciones y contacto con otros (tipo fobia social), ante los exámenes, a usar el transporte público, etc.
¿Cómo vive una persona con ansiedad incapacitante?
Una persona que presenta ansiedad incapacitante generalmente vive con la sensación de angustia, de miedo constante y sin que esa preocupación se le vaya por un minuto de la cabeza, intentando evitar las situaciones que le pueden provocar la ansiedad.
Esta coyuntura le lleva inexorablemente a una sensación de tristeza y, en ocasiones, de depresión clínica, puesto que observa cómo se va alejando de lo que para esa persona es importante (familia, amigos, compañeros, aficiones o intereses).
Es difícil que nos podamos poner en la piel de una persona que presenta ansiedad incapacitante porque sólo él o ella puede saber lo que se siente y lo que puede llegar a afectarle en su día a día. “Es como tener al león de la selva dentro de nosotros o en determinados momentos importantes de nuestro quehacer diario”.
¿Cómo ayudar a una persona con problemas de ansiedad incapacitante?
Lo más importante es entender que la ansiedad incapacitante tiene solución. Lo que necesita la persona es obtener el tratamiento adecuado y exigir el mismo con la rigurosidad científica y la adecuada praxis profesional.
En nuestra experiencia como profesionales, un aspecto que a nuestros pacientes les ayuda desde la primera sesión es que puedan entender qué es la ansiedad, cómo funciona y cuáles son las estrategias que hasta ahora han ido utilizando. Así podrán comprender si la estrategia seguida por ellos mismos les ha funcionado o no y proporcionarles pautas para abordarla desde otra perspectiva.
¿Qué no decirle a alguien con ansiedad incapacitante?
Al hilo del apartado anterior, cabe señalar que todos hemos ido aprendiendo desde nuestra tierna infancia a tratar de consolar a una persona que está sufriendo. Sin embargo, algunas frases que solemos decir, en lugar de aliviar, lo que pueden provocar es el efecto contrario.
Ejemplos de lo que NO debemos decirle a una persona que presenta ansiedad incapacitante: “no te pongas nervioso/a”, “no es para tanto”, “sal y olvídate de que tienes ansiedad”, “deja de pensar de ese modo”.
Algo que nos pasa con los problemas psicológicos es que tendemos a culpabilizar o responsabilizar a las personas que los sufren. Alguien que presenta un cuadro clínico de ansiedad o depresión jamás será el responsable de cómo se encuentra. No solemos culpabilizar a alguien con una enfermedad física, pero con los problemas de salud mental permanece aún esa tendencia a juzgar.
Nuestra recomendación es el acompañamiento a la persona que sufre a través de la comprensión, la empatía, la escucha activa y el apoyo en la búsqueda de los recursos y de los profesionales adecuados.
Psicólogos especializados en tratar ansiedad incapacitante
Como profesionales, lo que recomendamos es recibir el tratamiento adecuado. Por ello, en Psicomaster contamos con un equipo de psicólogos en Madrid especializados en ansiedad y en otros problemas psicológicos.
Además, contamos con formación y amplia experiencia en orientación Cognitivo-Conductual, Terapia de Aceptación y Compromiso y EMDR. Si quieres saber más, contacta con nosotros. ¡Te esperamos!
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