Actualizado por última vez el 13 octubre, 2025
Redactado por Mª Jesús Andrés Pérez
El consumo de drogas en adolescentes es un problema social importante, de interés y preocupación general. Para padres y profesionales, el uso indiscriminado de drogas en etapas de desarrollo evolutivo (como la adolescencia) es especialmente preocupante. Según la encuesta ESTUDES 2023, el cannabis es la sustancia psicoactiva ilegal con mayor prevalencia entre estudiantes de 14 a 18 años, con un 26,9% de ellos que reconocen haberla consumido alguna vez.
La adolescencia es la etapa donde se produce el salto de la infancia a la madurez, lo que conlleva una gran cantidad de cambios corporales, afectivos y cognitivos. Dichos cambios implican que los jóvenes sientan curiosidad, necesidad de vivir experiencias novedosas e intensas, conocer gente nueva, tener identidad propia y gozar de mayor autonomía.
Todos estos aspectos, combinado con que los primeros acercamientos al mundo de las drogas suelen ser en la adolescencia, convierten a los adolescentes en personas vulnerables al consumo de drogas.
Señales de alerta y causas del consumo de drogas en adolescentes
Tanto en el ámbito escolar como en el familiar hay señales de alerta que pueden indicar que algo está ocurriendo en el adolescente que se sale de lo esperable en esta etapa de su desarrollo. Algunos de estos indicios son:
- Fracaso escolar
- Bajada de rendimiento
- Problemas de concentración y memoria
- Actitud de rebeldía hacia las normas (y el no cumplimiento de estas)
- Amistades poco convenientes
- Facilidad para irritarse o enfadarse
- Susceptibilidad
- Desmotivación general
- Abandono de actividades (por ejemplo deportivas)
En cuanto a los factores factores que pueden contribuir al inicio del consumo de drogas en los adolescentes, existen múltiples causas:
- Baja autoestima
- Baja tolerancia a la frustración
- Conductas agresivas
- Problemas familiares
- Modelos cercanos de referencia en el consumo de drogas
- Fácil acceso en el entorno
- Factores de personalidad
Sin embargo, en estos casos es especialmente relevante el factor social.

El papel del factor social en las drogas en los adolescentes
En la adolescencia, la importancia que se da al grupo de iguales es máxima. Durante esta etapa existe un mayor deseo de aprobación social lo que, unido a que el joven aún está afianzando aspectos de su personalidad, lo hacen más vulnerable e influenciable.
Si el consumo de drogas en el adolescente comienza a ser frecuente, el proceso de desarrollo normalizado empieza a detenerse. Esto provoca una parada en la adquisición de habilidades que favorecen su madurez y comienzan a desarrollarse otro tipo de habilidades encaminadas al mantenimiento del consumo. Algunas de ellas son mentir, no asumir responsabilidades, conductas de riesgo o delictivas, comportamiento conflictivo, aislamiento, etc.
Una de las grandes preocupaciones actuales relacionadas a este tema es la patología dual (es decir, la coexistencia de un trastorno psiquiátrico con un problema de consumo de drogas). Esto es así por la normalización que se hace del consumo de alcohol y otras drogas entre los adolescentes, generalmente los fines de semana.
La mayor disponibilidad de las drogas para los jóvenes les acerca al consumo. Por tanto, quien padece algún tipo de trastorno psiquiátrico o psicológico, las consume para evitar los síntomas de su problema. Por ejemplo, un adolescente con un trastorno de ansiedad social puede consumir alcohol para “superarlo” momentáneamente, complicando así el trastorno y su pronóstico. También hay que tener en cuenta que el consumo de drogas puede desencadenar otro tipo de patologías mentales, además de la adicción.
Las 4 fases del consumo de drogas en adolescentes
Para entender cómo un consumo normal puede convertirse en dependencia, los investigadores Kandel (1978) y Kandel & Logan (1984) propusieron un modelo de cuatro fases del uso de drogas en adolescentes:
Fase 1: Experimentación
En esta fase se da un consumo no habitual todavía, que suele producirse en los últimos años de la enseñanza obligatoria. Son consumos fundamentalmente de tabaco, alcohol y cannabis, aunque también se da el consumo de otras sustancias como drogas de síntesis o cocaína.
El adolescente va aprendiendo los efectos que las drogas tienen en él. Aquí no se dan consecuencias negativas importantes en la vida del joven, haciendo que esto sea un factor de riesgo para mantener el consumo y pasar a fases posteriores.
Fase 2: Consumo abusivo temprano
Es en esta etapa cuando aparece la búsqueda reiterada de los efectos en el estado de ánimo o en su competencia social que el adolescente ha sentido en la fase de experimentación. Dichos efectos son percibidos como positivos (por ejemplo “quitarse la timidez”).
De esta forma, se va estableciendo un patrón de consumo de drogas frecuente y surge el fenómeno de la tolerancia adquirida (cada vez, el adolescente necesitará mayores dosis de la sustancia consumida para obtener el mismo efecto).
En estos casos es probable que se amplíe el número de sustancias a consumir y se busque experimentar cosas nuevas. Aquí ya nos encontraremos con interferencias en la vida del adolescente de tipo académico, familiar, social y personal.
Fase 3: Abuso
En esta tercera fase se da un cambio importante en la conducta habitual del adolescente. Dedica gran parte de su tiempo a pensar, conseguir y preparar el consumo de drogas, que puede darse incluso a diario. Toda o casi toda su actividad va a girar en torno al consumo, abandonando otro tipo de tareas.
Fase 4: Adicción
El fenómeno de la dependencia psicológica y/o física (dependiendo de la sustancia consumida) ya se ha instaurado. En esta fase se consolida el deterioro y el adolescente hace un uso compulsivo de las drogas. A pesar de que las consecuencias son graves, el joven mantiene el consumo.
Terapia juvenil para adicciones
Dependiendo de la fase en la que se encuentre el adolescente, la intervención tendrá objetivos diferentes: desde la prevención hasta el tratamiento de desintoxicación, deshabituación, rehabilitación y reinserción del joven.
Las estadísticas demuestran que la intervención grupal en adicciones es más efectiva, donde se integra a la familia como parte esencial del tratamiento de los jóvenes. El objetivo es tratar también a sus miembros, ya que además de sufrir las consecuencias devastadoras que las drogas provocan, les “ayuda a ayudar” al adolescente.
Por eso es muy importante actuar ante las primeras señales de que algo no va bien. No se debe justificar el comportamiento del adolescente como algo “normal” de su edad, como algo pasajero o que cambiará con la madurez, ya que no es así.
En este sentido, cuando hablamos de adicción, nos referimos a algo incontrolable para el adolescente pese a querer dejar de consumir y que requiere tratamiento médico, psicológico y social.
Si notas cambios preocupantes en el comportamiento, las emociones o las relaciones de tu hijo, no esperes a que la situación empeore. En Psicomaster contamos con psicólogos especialistas en adolescentes y prevención del consumo de drogas, que pueden ayudarte a comprender lo que está ocurriendo y ofrecer un plan de intervención eficaz.
Preguntas frecuentes sobre el consumo de drogas en adolescentes
¿Qué provoca el consumo de drogas en los adolescentes?
El consumo de drogas en adolescentes suele estar influido por una combinación de factores personales, familiares y sociales. Entre los más frecuentes se encuentran la baja autoestima, la necesidad de aceptación dentro del grupo, la curiosidad, el estrés, los conflictos familiares o el deseo de evadirse de emociones difíciles. También influyen el fácil acceso a las sustancias y la percepción de bajo riesgo que muchos jóvenes tienen.
En esta etapa, el cerebro aún está en desarrollo, especialmente las áreas relacionadas con el control de impulsos y la toma de decisiones, lo que aumenta la vulnerabilidad ante el consumo.
¿Cuáles son las señales de que un joven tiene un problema de drogas?
Las señales de alerta pueden variar, pero algunas de las más comunes son:
- Cambios bruscos de humor o conducta.
- Descenso del rendimiento escolar o absentismo.
- Aislamiento social o cambio repentino de amistades.
- Falta de interés por actividades que antes disfrutaba.
- Mentiras frecuentes o actitudes defensivas.
- Alteraciones del sueño o del apetito.
- Restos de sustancias o elementos asociados al consumo (papeles, pipas, pastillas, etc.).
Ante la presencia de varios de estos signos, es recomendable acudir a un psicólogo especializado en adolescentes y adicciones para una evaluación profesional.
¿Cómo es el comportamiento de un adolescente que consume drogas?
Un adolescente que ha iniciado el consumo de drogas puede mostrar conductas de riesgo, impulsividad y cambios emocionales intensos. Tiende a descuidar responsabilidades, mostrar irritabilidad o agresividad, y puede presentar comportamientos desafiantes hacia padres o profesores.
A medida que el consumo avanza, se observa pérdida de motivación, aislamiento, descuido de la higiene personal y una creciente dependencia emocional o física hacia la sustancia. El comportamiento suele girar en torno al consumo, escondiéndolo o justificándolo.
¿Cuáles son las consecuencias del consumo de drogas en los adolescentes?
Las consecuencias del consumo de drogas en adolescentes afectan a nivel físico, psicológico y social:
- Físicas: daños neurológicos, alteraciones hormonales, problemas de sueño y apetito, y deterioro general de la salud.
- Psicológicas: ansiedad, depresión, irritabilidad, pérdida de concentración, baja autoestima o incluso desarrollo de trastornos mentales graves.
- Sociales y familiares: conflictos constantes, aislamiento, fracaso escolar, comportamientos delictivos o ruptura de vínculos afectivos.
El consumo en esta etapa puede alterar el desarrollo cerebral y emocional, por lo que una intervención temprana con apoyo psicológico especializado es clave para prevenir secuelas a largo plazo.
Psicóloga colegiada M-16821
· Fundadora del Centro de Psicología Psicomáster
· Certificado Europeo de Clínico experto en EMDR por la Asociación EMDR Europa
· Experta en Apego y Disociación, Trauma e Integración de los estados del yo
· Certificado de Especialista en Psicoterapia acreditado por la Federación Europea de Asociaciones de Psicólogos (EFPA)
· Máster en Psicología Clínica Cognitivo- Conductual- Social
· Tutora Profesional de Prácticas en el Máster en Psicología General Sanitaria en la Universidad San Rafael - Nebrija
· Docente de práctica clínica, colaborando con varios Máster de la Asociación Española de Psicología Clínica Cognitivo Conductual
· Certificado Europsy de Especialista en Psicoterapia
· Medalla de Oro Foro Europa 2001
· Miembro de la Asociación EMDR-Europa
· Psicoterapeuta acreditada por la Asociación Española de Terapia Cognitivo-Conductual-Social (ASETECCS)
· Licenciada en Psicología por la UNE







Todos podemos caer en una adicción y lo único que conviene es que tengamos fuerza para luego poder salir de ella. Conviene ver cuáles son las causa que provocan la adicción y sus posteriores consecuencias y hacerlo ver al adicto. La ignorancia nos disimula el problema. Nada somos solos pero el apoyo de muchos y más cuando quien te apoya es un ser querido te puede dar las fuerzas suficientes para salir del laberinto en el que te hallas con la adicción
La adolescencia es la edad en la que los jóvenes creen ser más inteligentes, más poderosos, más preparados cuando en realidad son los más inexpertos, los mas influenciables y los más requeridos de comprensión y cariño
Si no puede solo busque apoyo en otros que conozcan el problema. Le podrán ayudar.
Le doy conocimiento del tema en http://causas-consecuencias.com/consecuencias-de-las-drogas/