Mucha gente habla, comenta, e incluso critica la actitud de otras personas en verano, más concretamente en este verano. Y es que, si vamos a cualquier playa, está llena de sombrillas, si vamos a un restaurante sin reserva, lo más probable es que no consigamos mesa y si pasamos por una terraza veraniega, el bullicio y sonido de vasos y conversaciones será ensordecedor. Gastamos menos y muchos no pueden permitirse gastar dinero, pero aún se ve a mucha gente tratando de disfrutar, cada uno en la medida de sus posibilidades. Algunos piensan que, por todo ello los demás pueden ser unos irresponsables o no ser suficientemente conscientes de la “situación por la que se está pasando”.
“No, si aquí no hay crisis…”, comentan molestos, sin pararse a pensar en los beneficios que tiene en estos duros momentos, desconectar de situaciones de estres para “cargar pilas”. Desconectar, del trabajo de todo un año, del estres de estar sin trabajo y también del coste emocional que conlleva para todos las noticias sobre la crisis que atravesamos, con la que nos despertamos todos los días con el café y el periódico y nos acostamos con el telediario.
Llevamos demasiado tiempo escuchando y preocupándonos por la crisis y sometidos al estres que eso conlleva.
¿Por qué deberíamos estar serios o tristes? ¿Solucionaríamos así la situación? ¿Nos darían así mejores noticias sobre la economía nacional y mundial?
Todos necesitamos descansar, cortar una inercia, parar una situación de estrés o de preocupación, aunque sea por unos días. Las vacaciones serán una excusa perfecta para dicha finalidad. Cada uno con sus posibilidades, ya que no tiene por qué ser más feliz el que se va a las Islas Seychelles.
Podemos irnos a nuestro pueblo, unos días al campo, al río, a la playa, a la montaña o simplemente pasear por un parque, relajarnos y descansar. Es importante que aprendamos a cuidarnos y mimarnos un poco, especialmente, cuando las condiciones del país y la política nos golpea duramente.
Aprovechar el buen tiempo, los rayos de sol y ocupar nuestro tiempo con actividades gratificantes, favoreciendo así que nuestro cerebro genere esas sustancias que ayudan a que nuestra vida sea mas fácil, llevadera y feliz.
Oxitocina, Dopamina, Finilananina, Endorfinas y Epinefrina, sustancias que fabrica nuestro cerebro y que desarrollan nuestros esquemas de conductas sexuales y paternales, que están relacionadas con el comportamiento de amor y ternura, que favorecen el entusiasmo, excitación y la motivación por la vida, que nos amortiguan el dolor, que nos preparan para el desafío y la lucha en la obtención de objetivos y metas. Esta es la consecuencia fisiológica de las vacaciones.
Así pues, que hay de malo en parar una inercia negativa y en tomar aire, para después estar más fuertes anímica y psicológicamente para seguir adelante.
Conclusión; ¡¡ DISFRUTEMOS NUESTRAS VACACIONES!!
Psicomaster
“Nuestro equipo se compone de varios psicólogos en Madrid capital de orientación Cognitivo Conductual, Terapia de Aceptación y Compromiso, EMDR y Servicio de Psiquiatría. Un equipo de especialistas titulados con varios master de formación, experiencia y altamente cualificados.”