La ansiedad me da náuseas ¿a qué se debe y cómo remediarlo?

Uno de los síntomas de la ansiedad, el tema que nos ocupa,  es que la ansiedad me da náuseas. Todos entendemos que es un síntoma muy desagradable. Desde Psicomaster, expertos en el tratamiento de la ansiedad, te hablamos en el siguiente artículo sobre el tema.

La ansiedad da náuseas, ¿cómo aliviarlas?

En artículos anteriores hemos visto que la ansiedad es un mecanismo de defensa. Todos tenemos un sistema de alerta ante situaciones que consideramos una amenaza en nuestras vidas.

Sabemos también que este mecanismo de defensa se da en todas las personas, que es normal, adaptativo, mejora el rendimiento y la capacidad de anticipación y de respuesta. Así mismo, sabemos que sus manifestaciones pueden deberse a un sinfín de razones y que podemos vivirlas de diferentes maneras a través de síntomas emocionales y físicos. Algunos de estos síntomas pueden aparecer súbitamente.

Náuseas por depresión

La depresión y las náuseas también están estrechamente relacionadas, y muchos pacientes que sufren de depresión también experimentan náuseas. Las náuseas pueden ser un síntoma directo de la depresión o una respuesta física a los efectos secundarios de los medicamentos antidepresivos.

La depresión puede afectar el equilibrio químico del cerebro, lo que puede provocar náuseas y otros síntomas gastrointestinales. Además, la depresión puede aumentar los niveles de ansiedad y estrés, lo que puede afectar la digestión y provocar náuseas.

Los medicamentos antidepresivos también pueden causar náuseas como efecto secundario. Si bien estos efectos secundarios son generalmente temporales y desaparecen con el tiempo, pueden ser una fuente de incomodidad y afectar la adherencia al tratamiento.

Si estás experimentando náuseas como resultado de la depresión, es importante buscar ayuda de un profesional

¿Qué son?

Me doy cuenta de que la ansiedad me da náuseas, pero también debo saber que las náuseas son uno de los síntomas.  Acabar con el problema de que la ansiedad me da náuseas no acabará con mi ansiedad. Entonces la solución no está en buscar como no tener náuseas, sino en cómo erradicar mi ansiedad.

Me obsesiono con que la ansiedad me da náuseas, pero debo entender que los síntomas sirven de alarma para saber que algo va mal, aunque es mi ansiedad la que debe requerir mi atención, ya que si consigo controlarla poco a poco iré comprobando como estos síntomas tan molestos irán disminuyendo, e incluso desapareciendo.

¿Cómo aliviarlas?

La ansiedad me da náuseas, ¿pero cómo puedo aliviarlas? Veamos algunas pautas a seguir para intentar paliar este síntoma tan desagradable que a todos nos preocupa tanto y que aparece, con bastante frecuencia en episodios ansiosos:

1. Cuida tu aparato digestivo

Desde Psicomáster, recomendamos siempre que no te mediques sin la recomendación de tu médico, aunque si podrías intentar mantener una alimentación más sana que la habitual, una buena hidratación, no saltarte comidas, respetar horarios, etc.

Si la ansiedad me da náuseas, a pesar de todo, entonces debo consultar con mi médico.

2. Piérdele el miedo a las náuseas

La ansiedad me da náuseas y tengo miedo. Esta reflexión es muy común, pero debemos saber que no porque sintamos náuseas significa que tu salud esté en peligro. Solo significa que tu estómago necesita un cuidado. Por eso cuando sientas náuseas trata de conseguir el control de la situación, tomate unos minutos para respirar profundamente, para relajarte.

Al mismo tiempo, también puedes repetir mentalmente frases positivas como “todo está bien”, “tranquilo/a”. Lo más importante de todo cuando pienses que la ansiedad me da náuseas es que dejes de sentir miedo, porque cada vez que sientas náuseas te asustarás más y estarás aumentando el problema. Por eso pierde el miedo a las náuseas y cuando las tengas; relájate, respira y piensa en frases positivas.

3. Escucha a tu organismo

Si la ansiedad me da náuseas, mi organismo algo tiene que decirme. Y es que algo no funciona bien en mí, me señala que tengo estrés acumulado, que estoy viviendo una situación que la interpreto como amenazante, que he perdido el control de mi vida  o que estoy desbordado/a. Escucha a tu organismo, vive en sintonía con tu mente, te está avisando.

4. Trata tu ansiedad

Asimismo, necesitas aprender a identificar y a gestionar tus emociones. Trabajar sobre esos pensamientos que te están generando ansiedad. Igualmente es necesario que resuelvas esas situaciones y comportamientos que te provocan malestar en tu vida.

Una buena técnica es escribir lo que sientes, lo que te molesta, lo que te genera rechazo o malestar y seguramente empezarás a controlar un poco tu situación y en consecuencia si piensas que la ansiedad me da náuseas, estas mejorarán.

Te recomendamos que eches un vistazo a nuestra web para ampliar información.

Otros síntomas de la ansiedad

Taquicardia

Cuando sufrimos una crisis de ansiedad, la activación de nuestro organismo se volverá muy elevada. Entonces aparecerán una serie de síntomas, como el miedo y este nos hiperactivará y nos provocará respiración acelerada, sudoración, temblores, taquicardia, sensación de debilidad o cansancio, falta de concentración, problemas para conciliar el sueño, problemas gastrointestinales, etc.

Ansiedad y taquicardia pueden aparecer juntas.

Como la ansiedad está diseñada para poder actuar ante un peligro o una amenaza, entre otros síntomas, sufriremos una aceleración cardíaca (taquicardia) y el corazón bombeará más rápido para llevar oxígeno a la sangre.

Ante esta situación mi cerebro interpretará que me está dando un infarto y en consecuencia me pondré más nervioso/a y esto hará que me active más, por tanto la taquicardia será mayor.

El miedo que provocan las taquicardias es el responsable de la creencia de que voy a padecer un infarto, una angina de pecho o incluso que vayamos a morir.

Si quieres ampliar esta información sobre la ansiedad y taquicardia consulta nuestro artículo: Ansiedad y taquicardia ¿Cómo se relacionan?

Cansancio

Cuando tenemos ansiedad nuestro organismo emplea un alto esfuerzo y gasta mucha energía para hacer que el corazón vaya más rápido y que el ritmo de nuestra respiración aumente. Por ello, tras un ataque de ansiedad es muy común quedarnos con unos niveles bajos de energía.

También ocurre que nuestro estado ansioso nos impide dormir bien, nos produce insomnio y esto no permite tener unos niveles óptimos de descanso. No descansamos lo necesario y no podemos recuperar la energía necesaria para poder funcionar con normalidad.

Si las personas van acumulando el cansancio, este llega a afectar seriamente a nuestra atención y si continuamos pensando en aquello que nos preocupa podemos sentir fatiga emocional.

Aunque el cansancio sea síntoma de ansiedad, encontrarse cansado no significa solo que se trate de un episodio ansioso. Puede ser una señal de que estés sufriendo una depresión o alguna otra patología médica. Si necesitas ayuda para superar la depresión, también contamos con un equipo de psicólogos de depresión en Madrid que te ayudarte a recuperar el ánimo y la esperanza

Ni el cansancio, ni la taquicardia, ni las náuseas, por si solas son suficientes para un diagnóstico de trastorno de ansiedad. Es importante que si tienes dudas consultes a tu médico de atención primaria para salir de dudas.

Para mayor información consulta nuestro post: Cansancio extremo por ansiedad.

Si quieres información sobre este tema o sobre cualquier otro en Psicomaster.es estamos a tu disposición. Nuestro equipo de psicólogos trabaja día a día para  cuidar de tu salud mental. Contacta con nosotros.