En muchas ocasiones, en consulta, nos encontramos con este tipo de situaciones y es que la ansiedad, como explicamos en otros artículos del blog puede tener múltiples causas. Si te sientes identificado o identificada con la frase “mi madre me da ansiedad”, sigue leyendo este artículo, ya que te daremos algunas claves para conocer por qué sucede esto y qué puedes hacer para gestionarlo.
En Psicomaster, trabajamos por la salud de las personas. El objetivo de nuestro blog es acercar la psicología a la población general y dar ciertas pautas para abordar situaciones que nos puedan generar dificultades en nuestro día a día. No obstante, si te encuentras ante un problema de ansiedad, será importante pedir cita con un profesional para que pueda ayudarte.
¿Por qué mi madre me da ansiedad? ¿Qué está pasando?
“Mi madre me da ansiedad”. Si has llegado a esta conclusión, es posible que te estés preguntando qué ha podido suceder en vuestra relación para que ocurra esto. Y es que muchas veces, no somos conscientes de un problema hasta que no llega la temida ansiedad.
Muchas de nuestras dificultades se dan en la relación con los demás. Así como relacionarnos con otros nos genera una serie de emociones, dichas emociones no siempre nos hacen sentir bien.
Si mi madre me da ansiedad, lo primero será plantearme qué está ocurriendo en la relación con mi madre. A veces tendemos a buscar “culpables” de nuestras emociones o a señalar al otro como tóxico. Si bien, es cierto, que hay ciertas personas cuya forma de relacionarse no es del todo saludable, también se puede llegar a generar una relación tóxica con otra persona sin llegar a ser plenamente conscientes de lo que está sucediendo.
Cuando la interacción con otra persona, ya sea nuestra madre, padre, familiares, amigos o pareja nos genera ansiedad, es el primer indicativo de que algo en dicha relación no está yendo bien. Puede ser que nos sintamos juzgados por dicha persona, que no nos permitamos ser nosotros mismos, que sintamos miedo a sus reacciones, que no nos sintamos cuidados o acogidos, etc.
A veces ayuda plantearnos la siguiente pregunta: “¿me permito ser yo mismo o yo misma en esta relación? ¿o por el contrario actúo dando más importancia a lo que piensa el otro que a mis necesidades?
A veces nuestros familiares, ponen ciertas expectativas en nosotros/as y muchas veces nos encontramos en el difícil camino de tener que cubrir dichas expectativas para sentirnos valorados, sintiendo que somos un fracaso si no lo conseguimos.
Esto hace que nos encontremos en relaciones donde nos exigimos a veces ser quien no somos, controlando nuestra conducta y no permitiéndonos ser libres de actuar como queremos. Además, hay personas que para asegurarse de que cumplimos sus expectativas pueden llegar a hacer uso del chantaje emocional, o bien de manera intencionada, o muchas veces sin ser conscientes de ello.
Plantearnos esto, si soy consciente de que mi madre me da ansiedad puede ser protector para nosotros/as. No para cambiar al otro, en este caso a tu madre, ya que no está en nuestra mano cambiar a nadie, y más si esa persona no está dispuesta a hacer cambios. Pero si podemos cambiar la manera de relacionarnos con dicha persona, protegiéndonos y permitiéndonos ser nosotros mismos.
Mi madre me da ansiedad, ¿qué puedo hacer?
Como mencionamos en el apartado anterior, aunque muchas veces lo más sencillo es esperar a que el otro cambie o bien reprochar su conducta, a menudo esto no genera una solución, sino que en muchas ocasiones agrava el problema.
Si ya he detectado el motivo o motivos por los que mi madre me da ansiedad, estoy un paso más cerca de poder hacer algo con dicha ansiedad. A continuación, te damos unas pautas que pueden ser de utilidad para ti:
▶ Permítete ser tú mismo/a
Cuando nos encontramos dentro de una relación que nos genera ansiedad, a menudo tendemos a comportarnos de una manera artificial o bien para evitar el conflicto o bien para ser aceptados por el otro.
A veces buscamos cubrir las exigencias o necesidades de los demás. Actuar de esta manera, implica en la mayoría de las ocasiones, dejar de lado nuestras propias necesidades.
Permitirnos significa escuchar lo que necesitamos, centrarnos en nosotros/as mismos/as y salirnos de lo que el otro espera de nosotros/as.
Esto nos ayudará a ver que nuestro valor no está determinado por los demás, permitiéndonos aceptarnos y cuidarnos.
▶ Pon límites
A menudo, cuando hablamos de relaciones tóxicas, solemos colocarnos en una posición pasiva o agresiva con el otro, pero pocas veces nos relacionamos desde la asertividad. Ser asertivo, no implica solo no levantar el tono al hablar, es la manera en la que me coloco frente al otro.
Si mi madre me da ansiedad, no se trata de darle todo el poder a ella, ni de quitárselo. La asertividad implica, hacer respetar mis derechos, respetando también a la persona con la que nos comunicamos.
Poner límites desde una posición asertiva, va a ser fundamental para protegernos. Esto significa, no ceder ante las exigencias del otro, dejando claro que respetamos su opinión, pero, sin embargo, pensamos de otra manera.
▶ Habla con ella
Como hemos mencionado anteriormente, a veces las personas no son conscientes de la manera de relacionarse que tienen. Aprendemos a relacionarnos en la relación con otras personas, es posible, por tanto, que tu madre haya aprendido a relacionarse de esa manera y no sea consciente del daño que puede generarte.
Cuando sienta que mi madre me da ansiedad, quizá una posible solución sea buscar un momento calmado para poder transmitirle cómo te sientes y alguna solución para cambiar vuestra relación. Podéis acudir a una terapia, que os ayude a lidiar con vuestros conflictos y a comunicaros de una manera más sana y libre.
▶ Pide ayuda profesional
Poner en marcha estas pautas no siempre es sencillo, además cuando hablamos de una relación tóxica, casi siempre nos encontramos con alguna “secuela” de dicha relación. Si tu madre te genera ansiedad, seguramente la relación que tienes con ella lleve años siendo complicada, por lo que puede ser que haya generado algún problema a nivel de autoestima como consecuencia.
Trabajar con un psicólogo de ansiedad en Madrid, te va a ayudar a entender mejor por qué mi madre me da ansiedad, a detectar las posibles áreas de conflicto con ella, a valorar las consecuencias que está teniendo para ti dicha relación y especialmente a protegerte para poder relacionarte con ella de una manera más sana para ti.
- ¿Cuándo la ansiedad se vuelve patológica? - 22 noviembre, 2021
- Ansiedad postquirúrgica: en qué consiste y cómo tratarla - 8 noviembre, 2021
- ¿Por qué voy al psicólogo y me siento peor? - 14 octubre, 2021
Quiero a mi madre pero me asfixia. Tengo 46 años y soy la mayor de 4 hermanos. No dudo que mi madre me quiera pero no creo que sea muy sana la manera que tiene de hacerlo. He llegado a un punto en que necesito espacio, distancia y no saber de ella por un tiempo. Es desgastante sentir pena y odio por ella. Pena porque es una persona difícil que no tiene actividades ni amistades ni otra vida que no sea estar pendiente de nosotros sus hijos, pero al mismo tiempo siempre se está quejando y criticando a uno y a otro. A mí me agobia, es como si en vez de ser otra persona quisiera que fuera su clon, cada vez que interactuamos es para decirme lo que tengo que hacer, el “yo también”, ” eres igual que yo” ( esto lo detesto, en nada me quiero parecer a ella) lo malo es que estoy básicamente repitiendo sus pasos y no quiero acabar igual, siento que me sentencia cada vez que habla de mi, y me absorbe a niveles que no son normales.
A razón de esto, me he desinstalado el WhatsApp para poner distancia y ahora siento culpa por alejarme de ella aunque sea unos días. Me arrastra a su bucle de pesimismo y desesperación. Sé que tengo que sanar el vínculo y perdonarla pero se me hace muy muy difícil.
Buenos días Claudia y bienvenida. Los síntomas que sientes hacia tu madre parecen estarn avisando sobre la toxicidad de la relación, quizás narcisista que te produce un enorme desgaste de energía y que te está mermardo por dentro. Tienes derecho a poner distancia y es lo más sano que puedes hacer para protegerte del daño que estás sufriendo. Te recomiendo el libro de Familia Tóxica de Iñaki Piñuel, en el que puedes encontrar algunas claves que te sean de utilidad. También te recomiendo que acudas a terapia psicológica para ayudarte con esto.
Mis mejores deseos,
Hola, mi relación con mi madre ha sido muy fluctuante, aveces estamos bien otras mal, yo siempre he sido incapaz de expresar mi sentimientos para no ofenderla, pero ahora estoy pasando por un momento para mí difícil, ella decidió dejarme sola y poner sus necesidades primero y no me dió la oportunidad a mi de hacerlo también. Entonces me siento deprimida y le guardo rencor, cada vez que hablamos lo único que siento es resentimiento. No sé qué puedo hacer.
Buenos días Caridad,
Pienso que debes expresarle a tu madre, en un momento adecuado en el que ambas estéis tranquilas, cómo te sientes. Hazlo en primera persona, sin acusarle. Guardarte lo que sientes no os va a ayudar a poder resolverlo. Comunícale que te gustaría poderos entender mejor, que para ello necesitas expresarle cómo te sientes y necesitas su comprensión, esté de acuerdo o no con si ella es responsable o no. No se trata de buscar culpables sino de favorecer la empatía y comprensión mutua. Puedes proponerle también acudir a terapia de familia, si ves que la cosa no mejora.
Mis mejores deseos,
Buenos días
Mi madre es una persona viuda hace 30 años desde esa fecha e estado siempre atenta a lo que necesite,yo estoy casada tengo hijos,pero ella a sido mi prioridad se que no debe ser,incluso no e viajado a otros lugares por no dejarla sola,tengo 4 hermanos pero ninguno se preocupa por ella,no fue fácil nuestra niñez pero últimamente me estoy sintiendo muy estresada,tengo mi trabajo estoy ansiosa,siento que es demasiado, pero ala vez me siento culpable por sentir esto,ya no tengo la misma paciencia,siento que necesito tiempo para mi.mis hijos ya son grandes dependientes.necesito que me Oriente o si estoy mal yo.saludos!!
Bienvenida María,
El papel de cuidadora de tu madre es duro y difícil, máxime a tan largo plazo. Se trata de una labor que requiere mucho sacrificio y entrega y en la que es muy importante escucharte, atender tus necesidades y cuidarte tu. Es normal que te sientas estresada sino compartes la tarea con otras personas y llevas tanto tiempo de renuncia y si no te cuidas lo suficiente y te permites tiempo de calidad para ti. Lo que te pasa responde al “síndrome del cuidador quemado”.
Te recomiendo buscar apoyo psicológico para esto e informate en tu localidad sobre grupos de autoayuda para compartir experiencias.
Te mando mucho ánimo,