La terapia psicológica para depresión: Trabajando la influencia de nuestros esquemas
La depresión mayor es un trastorno del estado de ánimo en el que aparece un sentimiento de profunda tristeza que está presente casi todo el día, junto con la pérdida de interés o incapacidad para disfrutar de las actividades que antes resultaban placenteras. Además pueden aparecer otra serie de síntomas como alteraciones del sueño, problemas para concentrarse, pérdida de peso, fatiga o falta de energía para llevar una vida normal, entre otros. A veces también puede aparecer un sentimiento de culpa inapropiado o pensamientos de muerte recurrentes. Como en todos los problemas psicológicos, la práctica clínica con terapia psicológica para depresión, nos muestra que dentro de este estado depresivo hay un continuo de gravedad. Es decir, no en todos los casos aparecen todos los síntomas ni con la misma intensidad.
Partiendo de los estudios de indefensión aprendida de Seligman (Seligman, M. E. P., 1975), hasta llegar a las teorías cognitivas de la depresión (Beck, A., 1967, 1976, 1979; Ellis, A. 1981, 1989, 1990), se han ido encontrando explicaciones razonables que nos van haciendo entender las razones por las cuales algunas personas llegan a este estado depresivo y otras en cambio no lo hacen. Estos enfoques nos hacen ver que una persona se deprime por la forma que interpreta la realidad, y no tanto por los acontecimientos que vive. De hecho en la terapia psicológica para depresión vemos que ciertas personas que viven situaciones extremas o acontecimientos estresantes continuados en el tiempo no llegan a deprimirse, sino por el contrario, logran integrar esa experiencia dentro de su historia vital como un aprendizaje. Sin embargo, otras personas que aparentemente no han vivido situaciones externas de gran impacto emocional, pueden llegar a este estado depresivo.
No cabe duda que las experiencias que vivimos influyen en nuestros estados emocionales. Sin embargo, lo que queremos poner de manifiesto es que ante una misma situación, será la interpretación que hagamos de ella la que nos llevará a superarla y seguir adelante, o por el contrario hará que experimentemos sentimientos de tristeza extrema e incluso lleguemos a perder el interés por las cosas. Parece que nuestros esquemas mentales funcionan como un filtro que mediatiza el impacto emocional de todas las experiencias que vivimos.
Terapia psicológica para depresión
Desde la terapia psicológica para depresión uno de los objetivos que trabajamos es la modificación de esquemas disfuncionales acerca de la realidad. Estos esquemas son producto de nuestros aprendizajes, de forma que los vamos construyendo a lo largo de la vida, y se encuentran en continuo cambio en función de nuestras experiencias (si bien cabe decir que nuestras vivencias durante la infancia son una influencia muy determinante, ya que un niño se encuentra en desarrollo y su personalidad está formándose). Filtran el procesamiento de la información que nos llega del entorno, y en gran medida se han ido formando a partir de las verbalizaciones que hemos recibido del exterior, constituyendo además una guía de nuestro comportamiento. De tal manera que si un niño recibe constantes advertencias de peligro asociadas a cualquier situación, construirá un amplio esquema de miedo que guiará su comportamiento hacia la evitación de todas ellas. En cambio, si recibe mensajes que inciten al acercamiento sus esquemas mentales serán de confianza y buscará la aproximación, fomentando su curiosidad por conocer.
Las personas que se deprimen suelen tener esquemas negativos sobre casi todo lo que les rodea, incluso sobre sí mismos o sobre su propio futuro. Estos esquemas se traducen en pensamientos más concretos que les dicen que la vida no merece la pena vivirla, que las cosas siempre le van a salir mal, y les traducen la propia incapacidad de cambiar o influir sobre su entorno o sobre su propia situación. Este tipo de esquemas generan en la persona un sentimiento de indefensión que le lleva a la apatía y a la falta de interés por casi cualquier cosa, ante la interpretación de que no puede hacer nada para cambiar su situación.
En la terapia psicológica para depresión los psicólogos de Psicomaster buscamos que la persona, en primer lugar tome conciencia de la existencia de esta forma de pensar y cómo influye en su estado anímico. Posteriormente tratamos de acompañarla en un proceso que consiste en cuestionar esos esquemas y modificarlos. Para ello empleamos pruebas de realidad encaminadas a demostrar que son erróneos, que a veces las cosas también le pueden salir bien, que tiene capacidad para cambiar su situación, etc. Por otro lado le hacemos ver la existencia de sesgos de pensamiento derivados de esos esquemas que le llevan a interpretar la realidad en un sentido extremo o a sacar hipótesis sin base real a partir de hechos aislados (“todo me va a salir mal”, “nadie me hace caso”, “la gente piensa que soy n inútil”, etc).
Dado que la persona con depresión utiliza estos esquemas negativos para hacer interpretaciones sobre sí mismo, su futuro y el mundo en el que vive, resulta bastante fácil entender el gran calado emocional que pueden llegar a tener si se deja llevar por ellos. Y debido a que son un componente aprendido de nuestro sistema de procesamiento, podemos verlos como un aspecto modificable mediante terapia psicológica para depresión en la que se puede reaprender de un modo más adaptativo.
Artículo de Drissa-Elma Delkader Palacios (Psicólogos en Madrid Psicomaster)
¿Te ha parecido interesante este artículo? Puedes darnos tu valoración:
Psicomaster
“Nuestro equipo se compone de varios psicólogos en Madrid capital de orientación Cognitivo Conductual, Terapia de Aceptación y Compromiso, EMDR y Servicio de Psiquiatría. Un equipo de especialistas titulados con varios master de formación, experiencia y altamente cualificados.”